‘Desde el feminismo con humor’-Opinión-

Pensaba yo que por fortuna la misoginia ni tan siquiera me había rozado a lo largo de mi existencia pero es, cuanto menos muy curioso y tal vez un pelín triste, comprobar cómo “compañeros” de profesión que se les presupone cierto nivel periodístico y empatía para ejercer el oficio adecuadamente, practiquen hacia sus propias colegas algún tipo de micromachismo que, para quien a estas alturas no lo sepa es, esa actitud machista asumida, generalmente encubierta y que no resulta evidente precisamente por lo sutil y cotidiana.

Todos los días vemos casos de jóvenes que sufren acoso, también dialéctico, y cuáles llegan a ser las trágicas consecuencias, más aún a determinadas edades. Nosotros mismos, los periodistas, informamos sobre ello. Por eso, hay que tener mucho cuidado y ser muy conscientes (y en nuestro trabajo si me apuran, al ser transmisores, más y mejor que nadie) de cómo, cuándo, dónde, por qué, y de qué manera, debe hacerse una crítica y no caer en lo que los psicólogos denominan “bullying relacional” o el temido y muy practicado “mansplaining”.

En mi caso, resulta significativo que a raíz de un artículo que al parecer no gustó a algunos compis, en lugar de llamarme o publicar otro rebatiendo mis datos, se dedicaran a hablar de mí en un grupo de whatsapp en el que yo no estaba. Eso sí, en términos muy cinematográficos.

 

Afortunadamente para mi persona y mejor aún para la propia profesión, sólo fueron “un colega y medio”, pero está claro que con este tipo de opiniones en un círculo tan cerrado, lo único que dejan al descubierto es su escasísimo nivel, infantilismo y cobardía.

Por cierto, en una ocasión con motivo de su visita a Priego para un certamen de cortos  de terror, el más famoso Hombre Lobo de nuestro cine patrio, cuyas películas de serie B entonces, hoy han sido convertidas en largometrajes de culto con infinidad de seguidores, el desaparecido y actual venerado Jacinto Molina, más conocido como Paul Naschy, me dijo que le recordaba mucho a Vampirella (personaje de cómic creado por Forrest J. Ackerman/José González en 1969), lo cual, y debido a la profunda admiración que él le profesaba, me pareció todo un elogio y el mejor de sus piropos. Así que no sufran por mí, compararme con brujas y vampiresas lo llevo de maravilla.

Finalmente referirles que adoro mis canas, y en respuesta directa al machirulillo de medio pelo que me recomendaba comprar un tinte, decirle que a mí jamás se me hubiera ocurrido mandarlo a Turquía o a la tienda de la esquina a comprar crecepelo. Ya saben, clases y clase.

Vivimos en un mundo global, multirracial y multicultural, así que disfruten y celebren si quieren este 8 de marzo y si no, pues a seguir trabajando y avanzando en beneficio del conjunto de una sociedad respetuosa, diversa, justa e igualitaria donde habitamos todos, ángeles y demonios, santos y diablos, porque, ni los santos son tan buenos, ni tan malos los diablos.

Malu Toro Ex-directora Radio Pública Municipal de Priego de Córdoba/Responsable de Contenidos www.radiopriego.com